Análisis Transaccional: Las posiciones existenciales y el guión de vida

A.T

Recordemos, como les expuse en el artículo anterior que el Análisis Transaccional nos ayuda a entender cómo es la estructura psicológica de la persona a través de la teoría de los tres estados del yo (Padre, Adulto y Niño o P.A.N.)

A.T.

De esa teoría se derivan las posiciones existenciales, el guión de vida y las transacciones o juegos psicológicos.

En esta entrega les voy a hablar sobre las posiciones existenciales y el guión de vida.

1. Las posiciones existenciales

En nuestro diario vivir, cambiamos fácilmente de un estado del Yo a otro en  función de lo que nos sucede,

Esos cambios ocurren a nivel inconsciente y son debidos a nuestra interpretación de la realidad, a los sentimientos generan ciertos acontecimientos y también a la frecuencia de experiencias positivas y /o negativas a lo largo de nuestro proceso de aprendizaje.

Todo ocurre siempre en la relación con algún otro, llámese Padre, Madre, Hermano, Abuelo, etc.

En cada relación existe un emisor y un receptor, y la dinámica que se genera es única de esa relación y responde a muchas variables, unas son conscientes y otras inconscientes.

La situación concreta que vive una persona es interpretada según las creencias que tiene sobre ellas, que a su vez están relacionadas con las experiencias de su primera infancia.

Según Eric Berne las posiciones existenciales son la consecuencia de las primeras vivencias y decisiones sobre nosotros mismos en relación con la otra persona de la cual dependíamos. Son “ciertas convicciones que el niño pequeño tiene sobre sí mismo y sobre la gente que le rodea” (Berne). Estas decisiones quedan en el inconsciente y hacen que formen parte del guión de vida de la persona cuando es adulta.

Las posiciones existenciales se clasifican en:

  • Yo estoy bien.
  • Tú estás bien.
  • Yo no estoy bien.
  • Tú no estás bien.

Cuando las combinamos, tenemos las cuatro posiciones que determinan las creencias que tenemos sobre nosotros, sobre los demás y sobre el mundo en general:

  • Yo estoy bien, tú estás bien.
  • Yo no estoy bien, tú estás bien.
  • Yo estoy bien, tú no estás bien.
  • Yo no estoy bien, tú no estás bien.

El valor que una persona se asigna a sí misma y a los otros está determinado por estas posiciones existenciales y se convierte en el marco de referencia en las interacciones con los demás. Obviamente atraemos lo que pensamos, así sea en forma inconsciente por lo que todo lo que le suceda y haga la persona, confirmará esta posición y su guión de vida.

En la terapia de Análisis Transaccional se analizan estas creencias inconscientes con el objetivo de reconfigurarlas para que desde el estado adulto, se logre cambiar hacia una posición existencial sana y balanceada: Yo estoy más o menos bien- tú estás más o menos bien.

2. El Guión de Vida

Berne definió el guión o plan de vida como “un programa desarrollado en la primera infancia bajo la influencia parental que dirige la conducta del individuo en los aspectos más importantes de su vida”.

Al hacer conciencia sobre cuáles son nuestras creencias limitantes podremos entender cómo nuestros condicionamientos o patrones de conducta aprendidos en la infancia determinan el éxito o fracaso en diversas áreas en nuestra vida adulta. La repetición de estas experiencias va configurando nuestro guión de vida.

Desde pequeños vamos escribiendo nuestro guión de acuerdo con las experiencias de éxito o de fracaso (merecido o inmerecido), lo cual refuerza y a su vez es reforzado por las posiciones existenciales.

Todas las experiencias vividas, como por ejemplo los mensajes de tus padres y de otras personas cercanas son muy importantes.

Las expectativas que se van generando acerca de nuestras capacidades para afrontar la realidad y los resultados positivos o negativos, serán internalizados e influyen en el concepto que tenemos de nosotros mismos, de los demás y del mundo en general.

Es decir que estas experiencias tempranas actúan como un filtro inconsciente que nos lleva a escoger y a clasificar a las personas y las experiencias. P. ej. el niño será confiado o desconfiado, buscará amor o pensará que no lo merece, creerá en sus talentos o ni siquiera sabrá cuáles son.

La posición existencial y el guión de vida condiciona nuestra forma de interpretar el mundo porque filtra todas nuestras conductas: desde el tipo de personas con quien nos relacionamos hasta cómo responderemos ante los retos que se nos presenten.

De esta manera, una persona con una posición existencial de “Yo estoy mal, tú estás bien”, repetirá los mismos errores para fracasar (aunque conscientemente no sea su deseo) y así mantener relaciones de dependencia que reforzarán aún más su guión de vida y le impedirán ser una persona felizmente realizada.

El Análisis Transaccional busca que seamos conscientes de nuestro guión de vida y podamos modificarlo entendiendo que cuando éramos niños no teníamos las capacidades ni el nivel de discriminación que tenemos como adultos.

Reinterpretando las experiencias pasadas podremos salir del círculo vicioso, de un guión de vida donde de antemano somos perdedores.

La reevaluación de las experiencias infantiles logra que se libere mucho dolor pero al mismo tiempo facilita la comprensión de este proceso.

Así, por ejemplo, si de niño te sentistes abandonado, excluido o rechazado por no contar con un apego seguro con el nivel de atención que necesitabas, no se debía a que no te querían sino a que vivían otra realidad que por tu condición de infante, no podrías valorar ni ser consciente. p.ej que la situación económica obligaba a tus padres a trabajar muchas horas para sostener a la familia. Las relaciones con hermanos mayores y cuidadores también influyen en las primeras impresiones de valoración que tenías sobre ti mismo. Después, las experiencias venían por la escuela, con los profesores y compañeros y más adelante, en la universidad, en tus relaciones de amistad y de pareja.

Con el pasar del tiempo cambiaron  los escenarios donde se fue reafirmando una determinada posición existencial y consolidando el guión de vida que tienes ahora como adulto.

En una próxima entrega les explicaré qué son las transacciones, cómo se clasifican  y  la comunicación entre los estados del yo de una persona con los de la otra para originar los llamados juegos psicológicos.

 

Saludos,

María Elena Trujillo H.

 

 

Sobre el autor del artículo María Elena Trujillo

Soy psicóloga, astróloga y coach. En el proceso e integrado varios enfoques lo cual me permite comprender ciertas experiencias de vida no frecuentes ni comunes para todos. Entiendo que hay diversas formas de ser y de estar en el mundo. Mi propósito es apoyarte y acompañarte en el proceso del descubrimiento de tí mismo, de aceptarte tal cual eres y mostrar cómo usar tus habilidades, capacidades y dones en tu propio beneficio. La meta es que logres conocerte más a tí mismo para desarrollar mayor coherencia, armonía, prosperidad, amor y agradecimiento por la vida.

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